- Comer Sano.
En cada cambio de estación es muy importante cuidar lo que comemos para fortalecer nuestro sistema inmunológico y aumentar así las defensas de nuestro organismo. Una alimentación sana y equilibrada, basada en productos ricos en vitaminas y minerales, es elemental para tener buena salud y evitar las gripes y catarros que suelen aparecer con los primeros fríos del otoño.
Lo maravilloso de comer la fruta de cada estación es que son más económicas, además la tierra es muy inteligente porque en el verano los alimentos tienen más agua y en el otoño e Invierno tienen más antioxidantes y vitamina C, por lo tanto verdaderamente tenemos alimentos disponibles que nos ayudan a protegernos.
La fruta más “colorida” es la que más antioxidantes y propiedades benéficas tiene. Estos colores o pigmentos vegetales son antioxidantes los usan de manera natural los vegetales o las frutas para protegerse, tales como: manzanas, jitomates, granadas, uvas, naranjas, mandarinas, espinacas, brócoli, pepinos, pimientos, etc.
Es bueno comer frutos secos como nueces, almendras y pistaches, ya que contienen antioxidantes y vitamina E que son buenos para combatir la resequedad del cuerpo.
- Hacer ejercicio
El ser sedentario es uno de los principales males que aquejan a las sociedades modernas. Llevar una vida activa, en que practicar con regularidad ejercicio físico juegue un papel principal en nuestra vida, nos ayuda a prevenir el exceso de peso y las enfermedades como (diabetes, hipertensión, problemas cardiovasculares, etc.) Además, las personas que hacen deporte de forma constante suelen tener hábitos de vida más saludables.
Es aconsejable la práctica de ejercicios de tipo aeróbico, (natación, montar en bicicleta, andar o correr). Es importante que se elija actividades con las que se disfrute. El combinar placer y salud es la forma más efectiva de convertir la práctica de ejercicio físico en un hábito diario. Pasear por los parques, ir caminando al trabajo o utilizar las escaleras en lugar del elevador también son formas de hacer ejercicio. En otoño, los árboles cambian sus hojas y la naturaleza nos regala un precioso espectáculo de vivos colores. Aprovecha y disfruta de actividades al aire libre en compañía de la familia.
- Duerme y descansa lo suficiente.
No dormir lo suficiente perjudica nuestro organismo y nuestra salud al obligarlo a estar con un nivel de esfuerzo y estrés innecesario. Se recomienda dormir un mínimo de 7 horas en adultos para que el descanso sea efectivo y se recupere el cuerpo de las actividades diarias. Para un buen descanso, se recomienda no practicar deporte durante las 4-5 horas antes de irnos a dormir y cenar al menos 2 horas antes de irnos a dormir.
- Controla Tu Estrés
El estrés es inevitable, pero cuando es prolongado debilita el sistema inmune. Uno de los muchos efectos del estrés es un timo encogido y atrofiado.
Administra tus niveles de estrés y refuerza tu sistema inmunológico. Durante el tiempo libre o las vacaciones, dedícate tiempo a ti mismo teniendo actividades que te hagan sentir alegre y practica algún ejercicio de relajación como el yoga.
- Mantente Abrigado
Es importante vestirse apropiadamente para el clima frío y evitar los cambios bruscos de temperatura, además de vacunarnos contra la gripe ya que es muy importante para no tener que pasar algunos días enfermos, además de que podemos contagiar a nuestra familia.
